5 de marzo de 2019

Alcohol y Obsesión


Alcohol y Obsesión

Por: J. Herculano Pires

La obsesión mundial por el alcohol, en el plano humano, corresponde a un cuadro espantoso de vampirismo en el plano espiritual. La medicina actual sigue siendo renuente – e infelizmente en los sectores más ligados al asunto, como lo es la psicoterapia – en aceptar la tesis espírita de la obsesión. Las investigaciones parapsicológicas ya revelaron, en los mayores centros culturales del mundo, la realidad de la obsesión.
Todos los verdaderos parapsicólogos, de renombre científico y no marcados por la obsesión del sectarismo religioso, proclaman hoy la realidad de las influencias mentales entre las criaturas humanas, y entre estas y las “mentes desencarnadas”.

Los cuadros de Cornélio Pires sobre la obsesión alcohólica son solo un juego poético. Ellos nos muestran – en un panorama del lado oculto de la vida – la mecánica de ese proceso obsesivo. Espíritus enemigos, (que ofendimos gravemente en existencias anteriores), nos excitan el deseo inocente de “tomarnos un trago”. Aceptamos la “idea loca” y Espíritus vampiros son atraídos por las emanaciones alcohólicas de nuestro cuerpo. A partir de entonces, como aconteció a Juca de João Dório, “nos dirigimos a la botella” y fuimos a terminar en el sanatorio. Los Espíritus vampiros son viciosos que murieron en el vicio y continúan en el mundo espiritual inferior, aquí en la Tierra, buscando ansiosamente sus “tragos”. Se satisfacen con las emanaciones alcohólicas de sus victimas y pasan a succionarlas como vampiros psíquicos.

Tomado del libro: Diálogos de los Vivos – J. Herculano Pires y Chico Xavier
Extractado del Sitio Centro de Estudios Espíritas Francisco de Asís.