El proceso de la Reencarnación
Antes de la Fecundación
por Jose Luis MartínAntes de la fecundación, previo al comienzo de la división celular, el “bebé”, es presentado y entregado a los Espíritus de sus progenitores, especialmente a la madre durante su emancipación del cuerpo físico que se da naturalmente durante el sueño fisiológico. En el plano espiritual esta lo recibe amorosamente en su forma de bebé y lo estrecha y abraza en su corazón, y aunque después no se acuerde del sueño una vez despierta, el sentimiento íntimo de la vivencia queda fijado en ella, dándole así la natural inclinación a la función de la maternidad.
El equipo de Espíritus constructores comprometidos en este proceso, no inician el mismo sin haber llevado a cabo antes el arquetipo de ese nuevo Ser material, muy cuidadosamente con arreglo al mapa genético humano de ambos progenitores y a los particulares factores kármicos del Ser, que son previamente analizados. Así el resultado final de esta formación del cuerpo carnal, está de antemano plasmado en el Periespíritu reencarnante, que actuará como molde del cuerpecito en formación.
Los Espíritus Constructores previamente a la fecundación han analizado y seleccionado el ovulo que es magnetizado al entrar en contacto con el periespíritu del Ser reencarnante que irradia y refleja sus propias características vibratorias en el mismo. Por Ley de Sintonía el ovulo energizado por los fluidos de los Constructores y por los del propio Espíritu reencarnante, atrae un espermatozoide concreto escogido entre millones, que aporta al Ser las características genéticas de acuerdo con sus necesidades evolutivas y según sus circunstancias deudoras con la ley de Consecuencias.
Estos fluidos con los que el Ser magnetiza previamente al ovulo, vienen determinados por la clase de experiencias y vivencias acumuladas en vidas anteriores. Así vemos como no es el azar biológico quien escoge el espermatozoide que se va a unir con el ovulo, sino la Ley de Consecuencias. Entre unos dos millones de espermatozoides, aproximadamente, solo el mas apto sintoniza sus genes con los del ovulo para comenzar la multiplicación celular que dará paso finalmente a un cuerpo físico con unas características concretas según la necesidad evolutiva del Ser reencarnante .
Después , a medida que avanza el embarazo, se va intensificando cada vez mas la unión fluídica del Ser con su materia, al tiempo que gradualmente va perdiendo los puntos de contacto que sostenía con el plano espiritual.
Es de reseñar por último, que mientras dura todo el proceso, el Ser reencarnante a pesar de su turbación, aún puede sintonizar mentalmente con los Instructores o Guías que le ayudan mientras él se va acoplando cada vez más a la materia. Otras veces se comunica directamente con
su madre, con la que a veces llega a hablar desde la forma infantil que aparece en el sueño bajo la figura similar que más tarde presentará el niño o niña en cuestión.
Tomado del Blog "Albacete Espírita"