Curaciones
Los Efectos del Fluido sobre los Enfermos son muy Variados
por Allan Kardec.El fluido universal, es el elemento primitivo del cuerpo carnal y del periespíritu, pues éstos sólo son transformaciones de aquél. Por la identidad de su naturaleza, este fluido condensado en el periespíritu puede suministrar al cuerpo los principios regeneradores. El agente propulsor es el espíritu, encarnado o desencarnado, que infiltra en un cuerpo deteriorado una parte de la sustancia de su envoltura fluídica. La curación se opera por la sustitución de una molécula enferma por otra molécula sana. El poder curativo dependerá de la pureza de la sustancia inoculada y también de la energía de la voluntad, que provoca una emisión fluídica más abundante y otorga una fuerza de penetración mayor, y, finalmente, de las intenciones que animan al curador, ya sea hombre o espíritu. Los fluidos que emanan de una fuente impura son algo así como medicamentos alterados.
Los efectos de la acción fluídica sobre los enfermos son extremadamente variados, según las circunstancias. Esta acción es lenta, a veces, y requiere un tratamiento continuado; pero otras, es rápida como una corriente eléctrica. Hay personas dotadas de un poder tal, que obtienen en ciertos enfermos curaciones instantáneas como sólo imponerles las manos y aun el solo acto de la voluntad. Entre los dos extremos de esa facultad, hay infinidad de matices. Todas curaciones de este tipo son variedades del magnetismo y sólo difieren por el poder y la rapidez de la acción. El principio es siempre el mismo: es el fluido el que juega el papel de agente terapéutico. El efecto está subordinado a la calidad del mismo y las circunstancias.
Extractos del Libro "El Génesis", por Allan Kardec.