Kardec Cuenta que Orientación le Dieron los Espíritus
por Richard Simonetti.Cuenta Kardec, en Obras póstumas, que cuando preparaba los originales de El Evangelio según el Espiritismo estuvo en un retiro, en Sainte- Adresse. Para allá fue enviada la comunicación de un mentor espiritual cuyo nombre no está registrado, donde se destaca el siguiente fragmento: Quiero hablarte desde París, aunque eso no me parezca de manifiesta utilidad, pues mis voces íntimas se hacen oír en torno a ti y que tu cerebro percibe nuestras inspiraciones, con una facilidad tan grande que ni tú mismo sospechas. Nuestra acción, principalmente la del Espíritu de Verdad, es constante a tu alrededor y de tal magnitud que no la puedes negar. Por eso, no entraré en detalles ociosos sobre el plan de tu obra, plan que, según mis consejos ocultos, modificaste tan amplia y completamente.
Observe, amigo lector: la entidad que orienta a Kardec explica que el plan inicial de Kardec, que pretendía tener en el Espiritismo una filosofía de bases científicas y consecuencias morales, estaba siendo modificado por la Espiritualidad para el advenimiento de la religión espírita. Continúa el mentor:
Ahora comprendes por que necesitábamos tenerte a mano, libre de toda otra preocupación que no fuese la de la Doctrina. Una obra como la que elaboramos necesita de recogimiento y de sagrado aislamiento. Tengo vivo interés por tu trabajo, que es paso considerable hacia el frente y abre, finalmente, la larga vía de las aplicaciones provechosas al Espiritismo, para el bien de la sociedad. Con esta obra, el edificio comienza a liberarse de los andamiajes y ya se puede ver su cúpula diseñándose en el horizonte. Continúa pues, sin impaciencia y sin fatiga; el monumento estará concluido en la hora determinada.
La comparación es perfecta.
El libro de los Espíritus, la base.
El libro de los médiums, las paredes.
El Evangelio según el Espiritismo, la cobertura o techado.
Se completaba el majestuoso edifico de la Doctrina Espírita, una filosofía con bases científicas y consecuencias religiosas. Una filosofía que explica los porqués de la vida. Una ciencia que le da autenticidad. Una religión que la hace repercutir en la vida de las personas. Saludemos, por tanto, lector amigo, el sesquicentenario de El Evangelio según el Espiritismo, en el que Kardec, bajo inspiración del Espíritu de Verdad y de tantas figuras del cristianismo primitivo, revive los ideales de una religión auténtica, dirigida hacia la comunión de pensamientos en torno a una vivencia legítimamente cristiana, a base de la instalación del Reino de Dios en la Tierra.
Extractado del Blog Luz Espiritual.