12 de julio de 2019

¿No Podría Dios Librar a los Espíritus de las Pruebas?

Progresión de los Espíritus 

¿No Podría Dios Librar a los Espíritus de las Pruebas?

por Allan Kardec.

119 – ¿No podría Dios librar a los Espíritus de las pruebas que han de sufrir para alcanzar el primer orden?
– Si hubiesen sido creados perfectos no tendrían mérito para disfrutar de los beneficios de esa perfección. ¿Dónde estaría el merecimiento sin la lucha? Además, la desigualdad que existe entre ellos es necesaria para sus personalidades y la misión que cumplen en los diferentes grados de la escala está en los designios de la Providencia, para la armonía de Universo. Puesto que en la vida social todos los hombres pueden alcanzar las funciones más importantes, se podría preguntar también ¿por qué el soberano de un país no promueve a cada uno de sus soldados a general? ¿Por qué todos los empleados subalternos no son empleados superiores y maestros todos los discípulos? Pues entre la vida social y la espiritual existe aún la diferencia de que la primera es limitada y no permite siempre alcanzar todos los grados, mientras la vida espiritual es indefinida y deja a cada cual la posibilidad de elevarse al grado supremo.

 Extractos del Libro "El Libro de los Espíritus", por Allan Kardec.



Una pregunta parecida a esta pero referida a la ley de gravedad, podría ser... ¿Dios puede eliminar la ley de gravedad para que la vida se haga mas liviana?
Obviamente la respuesta sería NO, al igual que la respuesta a esta pregunta sobre librar las penas a los espíritus.

Existe Algo que algunos llaman Dios y en mi caso Sistema Divino. La diferencia es que la idea de Dios, pareciera dar a entender que es un Ser que podría ser mas benévolo o mas enérgico según le vengan las ganas o las simpatias por tales o cuales. No es así.
Dios es un conjunto de reglas o leyes, Ley de Dios o Sistema y tiene características que no podemos cambiar, ni el mismo Dios podría hacerlo porque no depende de Alguien sino que es Algo que no sabemos ni sabremos como fue que existe y porque, pero Es y la prueba está a la vista de cualquiera que es Algo Perfecto e Inteligente.

El Espíritu Inmortal

La Comprensión de la Muerte como Interfase de la Vida  

El Espíritu Inmortal 

Por Maria Cristina Zaina

La muerte debe ser vista como parte inherente del proceso de la vida, y los tratamientos instituidos deben estar centrados no en la lucha contra la enfermedad, sino buscando la mejor calidad posible del tiempo restante y el conforto del paciente.

El conocimiento espiritista al hablarnos de la inmortalidad, desmitifica este proceso al mostrar que la muerte no es nada más que una faceta de nuestra propia vida como Espíritus inmortales. Que ya la vivenciamos muchas veces y que nuestra esencia permanecerá después del abandono del cuerpo físico, pues la vida prosigue ininterrumpidamente.

Es la certeza de que nuestros amores que ya partieron o que están por desencarnar no se perderán en el infinito; que es posible encontrarlos durante el sueño y que estarán siempre próximos a nosotros a través de los sentimientos y de los pensamientos afines, para los cuales no existen barreras. Todo esto nos sirve de profundo consuelo ante el dolor inevitable de la separación física.

Y al contrario de lo que pueda parecer, la constatación de que ella llegará para todos nosotros asociada a la consciencia espiritista, deberá llevarnos a reflexiones profundas sobre nuestras propias vidas y de cómo queremos morir; de la importancia de prepararnos -y también a nuestros familiares para estos momentos.

Morir para renacer. ¡¡¡Progresar siempre es la ley!!! Existimos para aprender y, por tanto, debemos aprender no solamente a vivir, sino también a morir. La desencarnación es el proceso por el cual evaluamos todo cuanto ya comprendemos de la propia vida.

La muerte siempre fue condición humana. Es preciso que retomemos la consciencia de esto y la tratemos como merece y debe ser tratada: proceso natural y muchas veces, libertador.

Extractos del Boletín "Flama Espírita"

Casos Increíbles de Lesiones Graves

El Periespíritu y los Miembros Fantasmas

Casos Increíbles de Lesiones Graves


En la obra "Espiritismo Dialéctico” (1960), del pensador espírita argentino Manuel S. Porteiro, encontramos hechos asombrosos para los psicólogos, mostrando, claramente, que los individuos con lesiones graves, incluso en los centros nerviosos, continúan comportándose naturalmente:

1) Caso presentado en la Academia de Ciencias de Paris por el Dr. Aguepin, el 24 de Marzo de 1945: "Después de operar un soldado que había perdido enorme parte del hemisferio cerebral izquierdo (sustancia cortical y blanca, núcleos centrales etc.), comprobó que el mismo continuó con su comportamiento normal, a despecho de las lesiones y pérdidas de circunvoluciones básicas para las funciones esenciales”.

2) Tamto Lisboa, llamado el Lusitano, publicó, en su libro "Práctica Médica”, de finales del siglo XVI, el siguiente caso: "Un niño de 10 años recibió un fuerte golpe en el cráneo, que cortó el hueso y la membrana meníngea, con pérdida de masa encefálica. Al contrario de lo esperado, la herida cicatrizó. Tres años después, moría hidrocéfalo. El cráneo fue abierto y, para espanto de los médicos, no se encontró el cerebro: en su lugar había líquido. Ese hecho fue considerado extraordinario, pues el niño vivió durante tres años en esta situación con plenitud de sus facultades psíquicas...”.

Para explicar éste y otros casos análogos, los materialistas recurren a la hipótesis del fisiólogo francés Pierre Flourens, según el cual un hemisferio cerebral podrá suplir la falta de otro. Y qué dirán en cuanto a la ausencia total de la masa encefálica? Ahí es que el materialismo se ve obligado a ceder terreno a la Ciencia Espírita y, no sólo en esos fenómenos, sino también en otros, estudiados por la Psicología de manera carente o insatisfactoria, como, por ejemplo, la doble personalidad.

Con el Espiritismo, se puede llegar a una conclusión: ir más allá e interpretar lo inexorable, esto es porque la respuesta está en nosotros mismos, en el conocimiento de la esencia del ser humano y de las partes en que está compuesto!

Tomado del Sitio "Centro de Estudios Espíritas Francisco de Asís"