La Tierra es Sólo un Átomo
por León Denis.La Tierra es sólo un átomo, sol prodigioso que rodea comitivas de esferas y cuyo curso rápido se mide a cada minuto por millones de años de luz.
Considera todas estas cosas y pide a tu razón, a tu juicio, si tanta belleza, esplendor, armonía, pueden resultar del azar, o si no es más bien una causa inteligente que dirige el orden del mundo y la evolución de la vida. Y si me objetas las plagas, las catástrofes, todo lo que viene para turbar este orden admirable, te responderé: escudriña los problemas de la naturaleza, no te detengas en la superficie, desciende al fondo de las cosas y descubrirás con asombro que contradicciones aparentes sólo confirman la armonía general, que son útiles para el progreso de los seres, que es el fin único de la existencia.
¿Si Dios hizo el mundo, replican triunfalmente ciertos materialistas, quien hizo pues a Dios? Esta objeción no tiene sentido. Dios no es un ser que se añada a la serie de los seres. Es el Ser universal e ilimitado en el tiempo y en el espacio, por consiguiente infinito, eterno. No puede haber allí ningún ser encima ni al lado de Él. Dios es la fuente y el principio de toda vida.
Nota: Desde hace algunos años, cierta escuela se esfuerza por sustituir al dualismo de la materia y del espíritu por la teoría de la unidad de sustancia. Para ella la materia y el espíritu son estados diversos de la única y misma sustancia que, en su evolución eterna, se afina, se depura, se vuelve inteligente y consciente. Sin abordar aquí la cuestión de fondo que necesitaría desarrollos largos, hay que reconocer que la idea que se hizo hasta aquí de la materia era errónea.
Gracias a los descubrimientos de Crookes, Becquerel, Curie, Lebon, la materia nos aparece hoy bajo estados muy sutiles y, en estos estados, reviste propiedades infinitamente variadas. Su flexibilidad es extrema. A un cierto grado de rarefacción, se troca en fuerza. G. Lebon pudo decir, con aparente razón, que la materia es sólo la fuerza condensada y la fuerza, la materia separada. En cuanto a deducir de estos hechos que la fuerza toma inteligencia en un momento dado de su evolución y se vuelve consciente, es solamente una hipótesis.
Para nosotros, hay, entre el ser y el no ser, una diferencia de esencia. Por otra parte, el monismo de Haeckelien, negando al espíritu humano una vida independiente del cuerpo y rechazando toda noción de la supervivencia, acaba lógicamente en las mismas consecuencias que el materialismo positivista e incurre en las mismas críticas.
Conceptos Extractados de "El Porqué de la Vida", por León Denis.