"Algo" sobrevive a la disgregación
por Camilo Flammarion.Las comunicaciones más frecuentes son las de los parientes y amigos. Estos están a nuestro lado, o. mejor dicho, la distancia no existe para ellos; entonces, una circunstancia imprevista puede revelar su presencia.
Los difuntos, manifiestan su supervivencia bajo los más distintos aspectos.
Lo que resulta con mayor evidencia de todas esas observaciones es que en nosotros hay un "algo" desconocido, negado, sistemáticamente, hasta hoy por todas las teorías científicas, y que ese "algo" sobrevive a la disgregación, del cuerpo orgánico, a la transformacion de nuestras moléculas materiales las que por otra parte, y desde el punto de vista estrictamente científico, tampoco pueden ser destruidas. Que a ese "algo" se le llame "principio", "elemento átomo psíquico", "alma" o "espíritu" el nombre no importa mayormente. Las manifestaciones (intencionales o involuntarias) de los difuntos, prueban que esa fuerza intrínseca de cada ser puede — en ciertos casos, y durante un período dé tiempo mas o menos largo, — ligarse con hilos sumamente tenues a la vida terrestre. Pero nada demuestra que sea esa precisamente la situación normal de todos los seres fallecidos.
El cambio que se produce entre la vida humana y el mas allá de la muerte, implica una nueva adaptación del estado psíquico, muy difícil de poder ser comprendida por nosotros los encarnados.
Esas deducciones sobre la existencia de los espíritus mas alla de la tumba, y su acción, son para Flammarión tanto más cierto en cuanto que le ha costado mas tiempo para constatarlas, comprobarlas y adoptarlas. Desde 1861 a 1922 median más de 60 anos. Un estudio imparcial de tal portada ofrece en si mismo una garantía de su valor científico; y sería lógico que quienes niegan aquellas observaciones pudieran oponerles un estudio de la misma naturaleza.
Conceptos Extractados de "La Muerte y su Misterio",