La transformación de la tierra
Cuando la humanidad se enfrenta a momentos de grandes calamidades, la solidaridad está independientemente de la religión o de la raza de los pueblos alcanzados con el objetivo de aliviar, por medios materiales y espirituales, el sufrimiento de las personas afectadas.
La transformación de la Tierra es gradual y continua. Eso significa que las reencarnaciones en este planeta serán más selectivas. Quienes están continuamente, de encarnación en encarnación, trabajando para el mal, sin reformarse, repitiendo curso una y otra vez, no volverán a reencarnar aquí. Serán sustituidos por espíritus más dóciles, más inclinados al bien. Es así que Kardec nos lo muestra en las siguientes frases y también en el ítem 20 del mismo capítulo: “La generación que desaparece se llevará consigo sus prejuicios y errores. La generación que vendrá, alimentada en una fuente de aguas más limpias e imbuida de ideas más sanas, imprimirá al mundo el movimiento ascensional del progreso moral, que caracterizará la nueva etapa de la Humanidad."
Kardec nos esclarece al respecto de esta nueva generación de espíritus que habitarán la Tierra, en el ítem 27 de este capítulo: Todo ocurrirá exteriormente como de ordinario, con la sola diferencia indicada. Mas esta diferencia tiene una importancia capital, y es que los espíritus indignos que encarnaban en la Tierra ya no volverán a hacerlo en ella. En el niño que nazca, en vez de un espíritu atrasado e inclinado al mal, encarnará un espíritu más avanzado e inclinado al bien.
Hay niños hoy mucho más dóciles, más comprensivos, más tolerantes, que comparten sus juegos, que son contrarios a los juegos violentos. Hay innumerables vídeos en internet que muestran a algunos de estos niños pidiendo a los padres que no discutan, que tengan más tolerancia el uno con el otro; otros muestran su indignación con la alimentación con carne y otros que hablan de la caridad para los menos favorecidos.
Estos niños son ciertamente parte de esta generación nueva de la que hablaba Kardec. Es importante resaltar que no puede rotularse esta generación nueva bajo la denominación de niños índigo o niños cristal, como se oye aquí y allá.
La generación nueva está inclinada al bien y sustituye a aquella generación que repitió curso continuadamente. Es así como el mundo se está reformando y se transformará. La Transición Planetaria, de la que tanto se habla, ya se inició y en verdad se está intensificando.
Extractado de la Revista Espirita FEE.