Los fenómenos Espíritas
por Marina SilvaLa fenomenología espírita llamó la atención de muchos científicos, sobre todo a partir de la segunda mitad del siglo XIX. Allan Kardec fue el primer estudioso que llevó a cabo un trabajo organizado, minucioso y lógico sobre los fenómenos espirituales. Sir William Crookes, considerado por muchos como el mayor científico de su época, investigó las facultades mediúmnicas de algunos sujetos y pudo confirmar la veracidad de los hechos espirituales.
A partir de esa época, muchos intelectuales pasaron a estudiar tales fenómenos; al principio para refutarlos, pero se encontraron con una verdad incontestable y se sumaron a la lista de los que creían. Todos ellos efectuaban experiencias con la mediumnidad, obtenían mensajes a través de la psicografía, de la psicofonía y de la audiencia; también observaron materializaciones mediante la utilización de ectoplasma, así como levitaciones, hipnosis y videncias. En 1975, el psiquiatra americano Raymond A. Moody Jr. presentó un trabajo serio sobre lo que se denomina Experiencias de Casi Muerte (ECM), comprobando científicamente que la muerte es sólo un cambio de estado de la conciencia.
LAS CIENCIAS MÉDICAS
En su libro Vida después de la Vida, el Dr. Moody relata casos de personas que estuvieron al borde de la muerte clínica, cuyas almas se desprendieron parcialmente del cuerpo, adquirieron una libertad significativa y, a su regreso al cuerpo, revelaron interesantes informaciones sobre la frontera entre la vida física y la espiritual.
El Dr. Melvin Morse también estudió casos semejantes, pero con niños que pasaron por graves accidentes y serias enfermedades, y reunió muchos casos. Sus experiencias no escaparon a la similitud observada antes y, entre los interesantes casos investigados, está el relato de Katie, una niña que le contó que durante su experiencia había ido a su casa en compañía de una muchacha, y allí vio a su hermano que estudiaba, mientras su madre cocinaba. Además, reconoció a todo el equipo médico que la había cuidado a su llegada al hospital mientras se hallaba en estado de inconciencia.
La contribución de personas serias, dedicadas al estudio de la supervivencia del alma, nos da la certeza de que la muerte no existe, y que seguimos viviendo en otro ámbito cuando nuestro cuerpo físico muere. No obstante, no nos permite vislumbrar la Justicia divina, dado que no explica la causa de las muertes prematuras ni los variados géneros de muerte, entre otras dudas que subsisten a nivel existencial.
Extractado de la Revista La Idea - Centro Espírita Argentino.