14 de diciembre de 2019

Nacimiento del reino vegetal

Evolución y Cuerpo Espiritual

Nacimiento del reino vegetal


Aparecen los virus y, con ellos, surge el campo principal de la existencia integrado por nucleoproteínas y globulinas, ofreciendo un clima adecuado a los principios inteligentes o mónadas fundamentales, que se destacan de la sustancia viva como centros microscópicos de fuerza positiva, estimulando la división cariocínésica.

Se evidencian, desde entonces, las bacterias rudimentarias, cuyas especies se perdieron en los orígenes profundos de la evolución, generando los minerales en la construcción del suelo, dividiéndose por categorías y grupos numerosos y plasmando, por reproducción asexuada, las células primitivas que serían las responsables de la eclosión del reino vegetal en su inicio.
Milenios y milenios se suceden y pasan...

Formación de las algas
Sustentado por los recursos de la vida que en la bacteria y en la célula se constituyen del líquido protoplasmático, el principio inteligente se nutre ahora con la clorofila, que revela un átomo de magnesio en cada molécula, precediendo a la constitución de la sangre, de que se alimentará en el reino animal.

El tiempo actúa sin prisa en su lento transcurrir en la cuna de la humanidad, y entonces aparecen las algas acuáticas, casi invisibles, con sus colas sinuosas desplazándose sobre las aguas, revestidas con membranas celulósicas y manteniéndose a costa de residuos minerales, siendo dotadas de una extrema motilidad y sensibilidad, como formas monocelulares en que la mónada ya evolucionada se eleva hacia un plano superior.

No obstante, son aún plantas que hasta hoy persisten en la Tierra como filtros de evolución primaria de los principios inteligentes en constante expansión, pero plantas superevolucionadas en los dominios de la sensación y del instinto embrionario, conservando el magnesio de la clorofila como testimonio de la especie.

Sucediéndolas por orden, emergen las algas verdes de constitución pluricelular, con nuevo núcleo e inaugurando la reproducción sexuada y estableciendo vigorosos combates provocadores de la muerte a través de ellos, así como metamorfosis incesantes que perdurarán, en el decurso de las eras, generando así la edificación de las nuevas formas del porvenir.

Extractos del Libro "Evolución en dos mundos", por André Luiz-Chico Xavier

Libro "Acción y Reacción" Chico Xavier\André Luiz « parte 73 »


Libro "Acción y Reacción" Chico Xavier\André Luiz « parte 73 »

Aprovechando la energía mental, mucho más poderosa que la fuerza electrónica, los proyectó, como legítimo hipnotizador, sobre el campo mental de Luis, que funcionó como mosaico, transformando las impresiones recibidas, en impulsos magnéticos, reconstruyendo las formas-pensamiento plasmadas por usted en los centros cerebrales, a través de los nervios que desempeñan el papel de antenas específicas, fijando así las particularidades en la esfera de los sentidos, en un perfecto juego alucinatorio, en el que el sonido y la imagen se entrelazan armoniosamente, como sucede en la televisión, donde la imagen y el sonido se asocian con el apoyo eficiente de aparatos conjugados, presentando en el receptor una secuencia de escenas que podríamos considerar como “imágenes técnicas”.
Los vengadores, al igual que yo, escuchaban la aclaración sumamente sorprendidos.
El asistente, como buen psicólogo, se valió de un argumento a la altura del expresado por Leonel, para demostrarle que también él, Silas, conocía el proceso de la obsesión en todos sus detalles.
Leonel, admirado, le abrazó y exclamó:
–Compañero, compañero, ¿de qué escuela procede usted? Su inteligencia nos interesa.
El jefe de nuestra expedición pronunció algunos monosílabos, y me invitó a que nos retiráramos, pretextando que tenía algo que hacer.
Los hermanos, expertos en la rebeldía, intercambiaron una extraña mirada, como para decirse que nosotros pertenecíamos a algún núcleo infernal distante y que no les convenía molestarnos.
Insistieron en que volviésemos al día siguiente para seguir hablando, a lo que Silas asintió con evidente satisfacción.
Pasados algunos minutos, el asistente, acompañado por mí, sacó a Alzira y a Hilario al exterior, encaminándonos de regreso a la Mansión.
El activo servidor del bien, en el viaje de regreso, se mantenía silencioso, pensando, pensando...
No obstante, ante mi perplejidad, aclaró fraternalmente:
–No, André, todavía es muy pronto para presentar a Alzira a los infortunados verdugos. Por la conversación de Leonel, percibí que tenemos enfrente a dos vigorosas inteligencias, cuyo cambio inicial ha de ser realizado con amor, para mayor seguridad. Volveremos mañana sin la presencia de nuestra amiga, para tener una conversación más estable y, por tanto, más valiosa.
Me dispuse a esperar, ansiosamente, el día siguiente.

Libro Psicografiado, "Acción y Reacción", por Chico Xavier\André Luiz


» 1,...707172737475767778798090...

Regreso a la Vida Corporal

El Proceso de la Reencarnación

Regreso a la Vida Corporal

por Cláudia Bernardes de Carvalho

Los espíritus vuelven sistemáticamente a la carne, para seguir su camino evolutivo hasta llegar al nivel exigido en moralidad y en intelectualidad. Por eso se concluye que todos nosotros somos seres milenarios, que hemos vivido muchas veces y aún reencarnaremos innúmeras más, perfeccionándonos poco a poco en todas las aptitudes que nos cabe desarrollar.

El período de vida en la Tierra es relativo. La vida puede durar más o menos años y obedece a  las necesidades de aprendizaje que trae cada espíritu individualmente desde el mundo espiritual.
Para eso Dios nos ha ofrecido un modo de adelantamiento: la encarnación, donde la conducta de los espíritus será puesta a prueba en varias tesituras y tendrá la oportunidad de espiar faltas del pasado. Así será hasta que el espíritu alcance el nivel mínimo aceptable antes de abandonar la experiencia de la encarnación en mundos materiales y que le permita vivir en mundos más adelantados donde no esté sujeto a las necesidades físicas. Una vez que el espíritu ya haya aprendido todo en lo tocante a su desarrollo en ese planeta, sigue su camino en otros mundos más adelantados.

Cuando un espíritu se equivoca en determinada actitud, ese error es una enseñanza y un medio de aprendizaje en que el espíritu sufre las consecuencias de no seguir el camino correcto de amor. Estas lecciones, así como las acertadas, en que el espíritu reafirma su postura en el bien, se quedan almacenadas en el inconsciente del individuo. Esa fuente de conocimientos que el espíritu adquiere por el error y acierto le llevará a renovarse evento tras evento vivido, buscando actuar bien y mejor, siguiendo la conducta intelecto-moral correcta.

Tomado del Blog "Amanecer Espírita"

La Causa de la Caída en el Vicio de los Estupefacientes está en la Ignorancia

Imagen relacionada

Vicios sociales

La Causa de la Caída en el Vicio de los Estupefacientes está en la Ignorancia

por Sebastián de Arauco

Los estupefacientes más comunes son: morfina, cocaína, opio, marihuana,
hachis, grifa y otras drogas narcóticas que traficantes sin escrúpulos presentan en cigarrillos, caramelos y dosis inyectables, etc. Estos y otros estupefacientes, conocidos también como drogas narcóticas, comienzan produciendo una excitación en las células cerebrales y nerviosas, y con su parte etérica también en la psiquis, produciendo una euforia alucinatoria que transporta a sus víctimas a un “paraíso” artificial momentáneo, de corta duración, sumiendo luego al toxicómano en un estado de depresión de indecible tortura y desesperación, al desaparecer la acción de la droga.

Y a poco de su uso, quien haya caído en esa trampa, tiene que ir aumentando
la dosis,pues la anterior ya no le hace el efecto deseado. Y el estado depresivo sigue en aumento, por lo que el toxicómano se desespera y todo lo sacrifica por la obtención de la droga que le saque de ese estado terrible de tortura. Ya no busca el placer como en el comienzo, busca salir de ese estado de tortura psicofísica, de alucinaciones horribles que, cual fantasma, le persiguen. Y en su tormento, busca desesperadamente la droga que le libere. Y en esa angustia, van pasando días y días, hasta que la obtención de la droga se le hace más difícil, y para cuyo objeto no vacila en valerse del robo, etc.; y entonces trata de huir de sí mismo, porque la vida ya no le ofrece sino sufrimiento, y comienzan a pensar en el suicidio como puerta de escape, que muchas veces ejecutan, pero las más de las veces les falta valor; y solo las clínicas especializadas pueden rehabilitarles.

La causa de la caída en el vicio de los estupefacientes está en la ignorancia,
porque quien los conozca jamás caerá en el error. Y la puerta de entrada es, generalmente, la ociosidad perturbadora, carentes de un objetivo de vida y que falto de un ideal, cedieron a las insinuaciones de malas compañías. Y el remedio está en la educación, al comienzo de la adolescencia, exponiendo con claridad, el peligro a que conducen esos y otros vicios ocultos, a fin de que, cuando algún descarriado le hable de ellos, el adolescente esté ya en guardia y pueda dominar la curiosidad, evitando la caída.

Todo hábito vicioso es contrario a las leyes naturales, e impedimento de progreso espiritual (objeto único de las vidas humanas); y es un lastre que mantiene a las almas viciadas apegadas al plano físico al desencarnar y en las secciones tenebrosas del astral inferior o mundo psíquico de las almas.

Extractos de "Revista Amor, Paz y Caridad".

El Mundo Invisible es, en Realidad, sólo la Prolongación del Mundo Visible

Pruebas Experimentales

El Mundo Invisible es, en Realidad, sólo la Prolongación del Mundo Visible

por León Denis.

El mundo invisible es, en realidad, sólo la prolongación del mundo visible. Más allá de los límites trazados por nuestros sentidos, hay formas de la materia y de la vida de las que la ciencia entiende cada vez más como posibles, desde que el descubrimiento de la materia radiante, la aplicación de los rayos X, los trabajos de Hertz sobre la telegrafía sin hilo, de Lockyer sobre las nebulosas, los de Becquerel, Curie, Lebon sobre la radioactividad de los cuerpos, le abrió todo un dominio ignorado de la naturaleza.

Los hechos espiritistas están lejos de ser despreciables, constituyen una de las revoluciones más grandes intelectuales y morales que se hayan producido en la historia del globo. Son el argumento más importante que se pueda oponer al materialismo. La certeza de revivir más allá de la tumba, en la plenitud de nuestras facultades y de nuestra conciencia, hace desaparecer el fantasma de la muerte. El conocimiento de las situaciones felices o penosas, hechas a los Espíritus por sus buenas o malas acciones, es una acción poderosa y moral. La perspectiva de los progresos infinitos, conquistas intelectuales, que esperan a todos los seres y los llevan hacia destinos comunes, puede sólo acercar a los hombres, unirles por lazos fraternales. La doctrina del Espiritismo experimental es la única filosofía positiva que responde a todas las necesidades morales de la humanidad.

Extractos del Libro "El Porqué de la Vida", por León Denis.

13 de diciembre de 2019

Libro "Acción y Reacción" Chico Xavier\André Luiz « parte 72 »


Libro "Acción y Reacción" Chico Xavier\André Luiz « parte 72 »

Silas, intencionadamente, dijo:
–¡Ah! ¡Sí!... Nos hallamos ante un proceso de transmisión de imágenes, hasta cierto punto análogas a los principios dominantes en la televisión, en el reino de la electrónica en el plano terrestre. Sabemos que cada uno de nosotros es un generador de vida, con cualidades específicas de emisor y de receptor. El campo mental del hipnotizador, que crea en el mundo de su propia imaginación las formas-pensamiento que desea exteriorizar, es algo semejante a la cámara de imagen del transmisor común, del mismo modo que ese dispositivo es idéntico, en sus valores, a la cámara oscura de la máquina fotográfica. Plasmando la imagen de la que se propone extraer el mejor efecto, la arroja sobre el campo mental del hipnotizado que, entonces, se comporta como un mosaico en televisión (62) , o en forma de película sensible en la fotografía. No imaginamos que en la transmisión de imágenes a distancia, el mosaico, recibiendo las escenas que la cámara está explorando, actúa como un espejo sensibilizado, convirtiendo los trazos luminosos en impulsos eléctricos, y enviándoles sobre el aparato de recepción que los recibe, a través de antenas especiales, reconstituyendo con ellos las imágenes por llamadas señales de video, y recomponiendo, de esa forma; las escenas televisadas en la pantalla del receptor común. En este caso, usted, Leonel, creó los cuadros que se propuso transmitir al pensamiento de Luis y, usando las fuerzas positivas de la voluntad, les dio colorido con los recursos de su concentración mental, que funcionó como una cámara de imagen.

(62)  En1931 Vladimir Kosma Zworykin desarrolló el captador electrónico que tanto se esperaba, el iconoscopio, que perduró hasta finales el siglo XX. El iconoscopio está basado en un mosaico electrónico compuesto por miles de pequeñas células fotoeléctricas independientes que se creaban mediante la construcción de un sandwich de tres capas. Este mosaico, que era también conocido con el nombre de mosaico electrónico de Zworykin se colocaba dentro de un tubo de vacío sobre el que se proyectaba, mediante un sistema de lentes, la imagen a captar. La lectura de la “imagen electrónica” generada en el mosaico se realizaba con un haz electrónico que proporcionaba a los pequeños condensadores fotoeléctricos los electrones necesarios para su neutralización. Para ello se proyecta un haz de electrones sobre el mosaico, las intensidades generadas en cada descarga, proporcionales a la carga de cada célula y ésta a la intensidad de luz de ese punto de la imagen pasan a los circuitos amplificadores y de allí a la cadena de transmisión, después de los diferentes procesamientos precisos para el óptimo rendimiento del sistema de TV (nota del traductor).

Libro Psicografiado, "Acción y Reacción", por Chico Xavier\André Luiz


» 1,...707172737475767778798090...

Las Revelación por el Espiritismo y la Ciencia

Las Revelación por el Espiritismo y la Ciencia

por Amalia Domingo Soler

Es misión de los sacerdotes ilustrar a sus feligreses, haciéndoles conocer todas las evoluciones de la ciencia o sea el desarrollo y el desenvolvimiento de la inteligencia humana, despertando su sentimiento y su amor al estudio, convenciéndolas de que el hombre sin instrucción es como el ave sin alas, como fuente sin agua, que vive sin vivir porque vive sin comprender a Dios, y vivir sin saber porqué vivimos, es una pobre vida.

El hombre ha de saber de dónde viene, porqué está hoy en la Tierra, y adonde irá mañana; y los que se llaman los ungidos del Señor, tienen obligación sagrada de difundir la luz de la verdad; y como la verdad es la ciencia, y en las demostraciones científicas se encuentra Dios, por esto la misión de los sacerdotes no es rezar rutinariamente las oraciones contenidas en su breviario. Su oración debe ser el estudio, su más ferviente plegaria, el análisis.

Bajo el punto de vista corporal y puramente anatómico, el hombre pertenece a la clase de mamíferos, de los que no se diferencia sino por accidentes en la forma exterior. En lo demás, la misma composición química que todos los demás animales, los mismos órganos, las mismas funciones y los mismos modos de nutrirse, de respiración, de secreción y de reproducción: nace, vive, y muere en las mismas condiciones, y a su muerte se descompone su cuerpo como el de todo ser viviente. No hay en su sangre, en su carne y en sus huesos, un átomo de más ni de menos que en la sangre, carne y huesos de los animales; como éstos al morir, devuelven a la tierra el oxígeno, el hidrógeno, el azoe y el carbono que se habían combinado para formarles, y vuelven éstos para nuevas combinaciones, a constituir nuevos cuerpos minerales, vegetales o animales. La analogía es tan grande que se estudian sus funciones orgánicas en ciertos animales, cuando no pueden hacerse los experimentos en el mismo.

Cueste lo que cueste a su orgullo, el hombre debe resignarse a no ver en su cuerpo material sino el último anillo de la animalidad sobre la Tierra. El inexorable argumento de los hechos está ahí, contra el cual no hay protesta que valga.
Pero cuanto más el cuerpo disminuya en valor a sus ojos, tanto más aumenta en importancia su principio espiritual; si el primero lo pone al nivel del bruto, el segundo lo eleva a una altura inconmensurable. Vemos el circulo en que el animal se detiene; mas no podemos alcanzar, ni aún con la imaginación, el límite a que puede llegar el Espíritu del hombre.
De ahí puede inferir el materialismo con el Espiritismo, lejos de temer los descubrimientos de la ciencia y su positivismo, se anticipa a ellos y los impulsa, porque está seguro de que el elemento espiritual que tiene su existencia propia, no puede recibir menoscabo alguno.
La existencia del principio espiritual es un hecho, que no tiene por decirlo así más necesidad de demostración que el principio material; es en cierto modo una verdad axiomática, que se afirma por sus efectos como la materia por los que le son propios.

Según la máxima, todo efecto tiene una causa, todo efecto inteligente debe tener causa inteligente; no hay quien no reconozca una diferencia entre el movimiento mecánico de una campana agitada destinado a dar una señal, o un aviso, revelador por lo mismo de un pensamiento, de una intención. Pero a nadie que tenga sano el entendimiento, se le puede ocurrir la idea de atribuir el pensamiento a la materia de la campana, se deduce que ésta es movida por una inteligencia a la que sirve de instrumento para manifestarse. Por la misma razón a nadie se le ocurre la idea de atribuir el pensamiento a un cadáver humano. Si el hombre vive y piensa, es porque hay en él algo que falta al cadáver. La diferencia que hay entre el hombre y la campana, es que la inteligencia que hace mover aquélla se halla fuera de ella, mientras que la que hace mover al hombre está en él mismo.

El principio espiritual es el corolario de Dios: sin este principio, no tendría Dios razón de ser, porque no se concebiría el soberano poder ni la infinita inteligencia, reinando eternamente sobre la materia bruta, del mismo modo que no se comprendería un soberano terrestre, ejerciendo su reinado sobre las piedras. Y como no se puede comprender a Dios sin los atributos esenciales de la Divinidad, entre los cuales son la justicia y la bondad, éstos carecerían de objeto si sólo hubieran de ejercitarse sobre la materia.
Por otra parte no podría concebirse un Dios justo y bueno en sumo grado, creando seres inteligentes y sensibles para reducirlos a la nada después de algunos instantes de sufrimiento sin compensación; recreando su vista en esta sucesión indefinida de seres que nacen sin haberlo solicitado, que piensan un instante para no conocer más que el dolor, y que se disipan para siempre después de una existencia efímera.
Sin la supervivencia del ser inteligente, los sufrimientos de la vida serían, de parte de Dios, una crueldad sin objeto. Por eso el materialismo y el ateísmo son corolarios recíprocos: negando la causa se niega el efecto, y negando el efecto no puede admitirse la causa. El materialismo es consecuente consigo mismo, ya que no lo es con la razón.
Según afirma Kardec, en el principio espiritual ven el corolario de la existencia de Dios. Como se ve no pueden estar más afines en el fondo los que tan distantes suelen estar en la forma.

Pues hablando, si en la Creación no hubiera más mundo habitado que la Tierra, podríamos decir juzgando por las apariencias, que Dios estuvo poco previsor en el plan de su obra; porque de la Tierra hay que decir lo que dicen que dijo un inglés al visitar la católica España: que le gustaba el suelo y el cielo, pero no el entresuelo; esto es, le encantaba su fecundo suelo, su sol de fuego, pero no sus hombres impresionables e irreflexivos; y esto mismo se puede decir de la Tierra.

La naturaleza ostenta su espléndida hermosura, en los rugientes mares, en la cordillera de las montañas, en los amenos valles, en los frondosos bosques, en el firmamento con sus múltiples velos atmosféricos, en las auroras boreales que cual sonrisas divinas alegran las regiones polares, en los torrentes que a prodigiosa altura lanzan sus hirvientes cataratas, en los fenómenos ópticos que producen los rayos solares sobre las nubes, que disueltas en menuda lluvia fertilizan la tierra, en este orden admirable por lo cual se armoniza, todo se enlaza, todo se eslabona en el trabajo incesante de la naturaleza; y sólo el hombre, es el Satán de la leyenda que se revela contra su Creador; en la Tierra todo habla de Dios, ¡Todo! Menos el hombre a pesar de llevar en su frente el distintivo de su genealogía Divina.

Le falta al hombre de este planeta la virtud que según Platón es el origen de las ciencias y de las artes: no sabe admirar, y como no sabe admirar, no ama a Dios, y no amándole no le comprende, y no comprendiéndole, es deísta; por esto las religiones han sido la parodia de la religión, y las primeras deben su origen a la escuela ateísta, nacida dentro de los abusos de la escuela deísta, siendo el ateísmo la consecuencia lógica, el resultado natural de los anacronismos religiosos.

Y este mundo, donde la vida es un dolor sin tregua, donde los que se llaman los iluminados del Señor, martirizan y queman a sus hermanos inventando todas las torturas, y todos los suplicios más fuertes y más crueles, como sucedía con el tribunal de la santa inquisición; y no hay religión que no tenga su abolengo en las hogueras y en los campos de batalla, siendo la historia de todas las religiones, persecuciones, desmanes y abusos; y dejando aparte el elemento religioso, busquemos a los que se llaman sabios, y veamos en otro sentido que tampoco comprenden a Dios, prueba de ello es cuando dijo Laplace, que para hacer su tratado de cosmogonía, no había necesitado de la hipótesis Dios; y Virchow decía, que se pueda comprobar la generación espontánea para no admitir la existencia del Creador, para eludir la intervención de una inteligencia ordenadora en la organización de la materia.

¿Y este mundo donde los deístas apelan a la fuerza bruta, para convencer a los mal llamados sabios, niegan la suprema sabiduría para hacer valer sus hipótesis, y huyen de la clara luz del Sol, y quieren ahuyentar la oscuridad en que viven, con la luz vacilante de absurdas teorías? ¿Y este mundo, repetimos, cuya humanidad es tan defectuosa, tan rebelde, tan antirracional, que o mata en nombre de Dios, o le niega en nombre de la ciencia: el hombre terrenal tal como es hoy, puede ser considerado como el Rey de la Creación? No; es completamente imposible; lo será en otros planetas, cuando tenga mejores condiciones, cuando adquiera lógica y raciocinio suficiente para comprender la gran misión que le toca cumplir; por esto encontramos pobre la creencia que afirma ser la Tierra la única morada del hombre, para en ella adorar a Dios.

Nace la luz en la comparación de la causa con los efectos: y la causa Dios, ¡Es inmensa! ¡Infinita! ¡Infinitísima!… y el efecto Tierra, ¡Es pequeño! ¡Microscópico! ¡Infinitesimal!… Por esto entre el hombre terrenal y Dios, deben mediar innumerables razas, cuyo número fijo ningún matemático podrá sumar jamás.

Los terrenales somos muy pequeñitos todavía, porque nuestra civilización, no nos ha dado más que un necio orgullo, una presunción insoportable: revelándose en los unos con la creación de un Dios inadmisible, y en los otros con la negación del principio de la vida; ni los religiosos, ni los semi-sabios han comprendido la omnipotencia del Ser Supremo.

Raudales de ciencia y raudales de amor hacen falta en la Tierra; y fijarse menos en las palabras y más en los hechos: siendo las religiones las encargadas de operar un cambio social.

Vencedores pueden ser todos los hombres que busquen la luz de la verdad; y la iglesia católica si se afilia al racionalismo moderno, podrá ser todavía una de las escuelas religiosas que tenga un buen número de adeptos: pero ha de seguir paso a paso la marcha de la civilización actual; ha de interpretar fielmente las enseñanzas de Cristo; ha de comprender en su valor inmenso su divina revelación.

¡Cuan bien la describe Kardec en su Génesis!
La parte más importante de la revelación de Cristo, en el sentido de que es el principal distintivo y la piedra angular de toda su doctrina, es el nuevo punto de vista bajo el cual hace considerar a la Divinidad. No es el Dios terrible, celoso y vengativo de Moisés; el Dios cruel implacable que riega la Tierra con sangre humana, y ordena la matanza y exterminio de los pueblos, sin exceptuar a las mujeres, niños y ancianos. No es el Dios injusto que castiga a todo un pueblo por el pecado de su Rey; que se venga del culpable en la persona del inocente, y que hiere a los hijos por las faltas de sus padres; sino un Dios clemente, soberanamente justo y bueno, lleno de mansedumbre y de misericordia, que perdona al pecador arrepentido y da a cada uno según sus merecimientos. No es el Dios de un solo pueblo privilegiado, el Dios de los ejércitos que preside los combates para sostener su propia casa contra el Dios de los otros pueblos; sino el Padre común del género humano que extiende su protección a todos sus hijos y los llama hacia Él. No es tampoco el Dios que recompensa con los bienes de la Tierra, y que hace consistir su gloria y la felicidad en la dominación y esclavitud de los pueblos rivales y en la multiplicidad de su progenie; sino que dice a los hombres: vuestra verdadera patria no está en este mundo, sino en el cielo; allí es donde los humildes de corazón serán ensalzados, y abatidos los soberbios. No es el Dios que hace una virtud de la venganza y manda dar ojo por ojo y diente por diente; sino el Dios de misericordia, que dice perdonad las injurias, si queréis que se os perdonen vuestros pecados: devolved bien por mal; no hagáis a otro lo que no queréis que hagan con vosotros. No es ya el Dios mezquino y meticuloso que impone bajo las más rigurosas penas la manera con que quiere ser adorado, y que se ofende por la inobservancia de una fórmula; sino el Dios grande que mira las intenciones y no se honra con las exterioridades.
No es en fin, el Dios que quiere ser temido; sino el Dios que quiere ser amado.

Toda la doctrina de Cristo está fundada sobre el carácter que atribuye a la Divinidad. Con un Dios imparcial, soberanamente justo, bueno y misericordioso, ha podido hacer del amor de Dios y de la caridad para con el prójimo, la condición única de salvación, y decir: ésa es toda ley y los profetas, y no hay otra.

Sobre esta creencia se ha podido basar la igualdad de los hombres ante Dios, y la fraternidad universal. Esta revelación de los verdaderos atributos de la Divinidad, unida a la de la inmortalidad del alma y de la vida futura, modifica profundamente las relaciones mutuas de los hombres; les imponía nuevas obligaciones; les hacía mirar la vida presente bajo otro aspecto, y debía por consecuencia, modificar profundamente las costumbres y relaciones sociales. Éste es incontestablemente por sus consecuencias el punto más capital de la revelación de Jesucristo, cuya importancia no se ha comprendido lo bastante. Sensible es decirlo, es el punto en que más se han apartado las creencias y que más se ha desconocido en la interpretación de sus enseñanzas.
Es verdad; y esas enseñanzas deben de ser estudiadas por todos los hombres de buena voluntad, vengan de donde vengan y sean quienes sean. La humanidad debe de trabajar unida porque la unión constituye la fuerza; y ya que tantos siglos hemos perdido sumidos en la ignorancia, justo es que despertemos de nuestro sueño, y todas las escuelas busquen a Dios en la ciencia. ¡Oh! Sí, en la Ciencia y la Caridad.
Toda la mitología pagana es en realidad un extenso estudio alegórico de las diversas fases buenas y malas de la humanidad. Para quien sabe desentrañar su Espíritu, es un curso completo de la más alta filosofía, como lo son por su estilo las fábulas modernas.
Lo absurdo era tomar la forma por el fondo. Pero los sacerdotes paganos no enseñaban más que la forma, sea porque algunos no supiesen más, o porque tuviesen interés en mantener a los pueblos en creencias que favoreciendo su dominación, les eran más productivas que la filosofía. La veneración del pueblo a la forma, era una fuente inagotable de riquezas, por los donativos acumulados en los templos, las ofrendas y sacrificios hechos a los Dioses, en provecho de sus representantes o ministros. Un pueblo menos crédulo hubiera dado menos importancia a las imágenes, a las estatuas, a los emblemas y a los oráculos; y Sócrates fue condenado como impío a beber la cicuta, por haber querido secar esa fuente, poniendo la verdad en lugar del error.
Entornes no estaba aún en uso el quemar vivos a los herejes, pero quinientos años antes de Cristo fue condenado a la infamante muerte como impío, porque como Sócrates, quiso sustituir el espíritu de la letra y porque su doctrina esencialmente espiritual, destruía la supremacía de los escribas, fariseos y doctores de la ley.
Lo mismo sucede con la Génesis, en la cual hay grandes verdades morales bajo figuras materiales, que tomadas a la letra, serían tan absurdas como si en nuestras fábulas se tomaran al pie de la letra las escenas y los diálogos que se atribuyen a los animales.
Adán es la personificación de la humanidad; su falta individualiza la debilidad del hombre, en quien predominan los instintos materiales, a los que no sabe resistir.
El árbol, como árbol de la vida, es el emblema de la vida espiritual; como árbol de la ciencia, es el de la conciencia que el hombre adquiere del bien y del mal por el desarrollo de su inteligencia y del libre albedrío, en virtud del cual escoge entre ambos; indica el estado aquel en que el hombre, dejando de ser guiado sólo por el instinto, toma posesión de su libertad y contrae la responsabilidad de sus actos.
El fruto del árbol es el emblema del objetivo de los deseos materiales del hombre; es la alegoría de todo apetito desordenado; resume bajo una misma figura los motivos de inclinación al mal; y comer de él, es sucumbir a la tentación. Crece en medio del jardín de delicias, para dar a entender que la seducción está en el fondo mismo del placer, y recordar al mismo tiempo que si el hombre da la preferencia a los goces materiales, se apega a la tierra y se aparta del camino de su destino espiritual.
La muerte con que le amenaza si infringe la prohibición que se le hace, es un aviso de las consecuencias inevitables, tanto físicas como morales, que acarrea la violación de las leyes divinas gravadas en su conciencia. Es evidente que no se trata aquí de la muerte corporal, puesto que, después de su pecado, Adán vivió aún por mucho tiempo; sino de la muerte espiritual, es decir, de la pérdida de los bienes del adelantamiento moral, de cuya pérdida es imagen la inmediata expulsión del jardín de las delicias.
La serpiente está lejos de representar hoy el tipo de astucia. Es pues, en este pasaje con relación a su forma, más que a su carácter, una alusión a la perfidia de los malos consejos que se arrastran como la serpiente y de los cuales muchas veces, por esta razón, no se desconfía. Por otra parte, si la serpiente fue condenada a arrastrarse sobre su vientre, por haber engañado a la mujer, se deduciría que antes tendría piernas, en cuyo caso no sería serpiente. ¿A qué fin imponer a la credulidad sencilla de los niños como verdades, alegorías tan evidentes y que falseando su juicio, les hacen luego mirar los libros sagrados como un tejido de fábulas absurdas?
Si el pecado de Adán no fue otro que el de haber comido un fruto, no puede justificar por su índole casi pueril, el rigor con que fue castigado. Tampoco se puede racionalmente admitir que consistió en el hecho que generalmente se supone; porque considerándolo como crimen indigno de perdón, Dios habría condenado su propia obra, puesto que habría creado al hombre para su propagación. Si Adán hubiese entendido en este sentido la prohibición de tocar el fruto del árbol, y se hubiese conformado con ella, ¿Dónde estaría la humanidad, y qué habría sido de los designios del Creador? Dios habría creado el inmenso aparato del Universo para dos solos individuos y la humanidad habría venido contra su voluntad y sus previsiones.
Dios no creó a Adán y a Eva para estar solos en la Tierra, y la prueba la tenemos en las mismas palabras que le dirigió inmediatamente después de su formación cuando estaban aún en el paraíso terrestre. “Y bendíjolos Dios, y dijo: creced y multiplicaos y henchid la Tierra y subyugadla”. Puesto que la multiplicación del hombre era una ley desde el paraíso terrestre, su expulsión no pudo tener por causa el hecho que se supone.
¿Cuál es entonces ese tan enorme pecado que ha podido dar lugar a la reprobación sempiterna de todos los descendientes del que la a cometido? Caín el fratricida, no fue tratado con tanta severidad. Ningún teólogo ha podido explicar ese punto lógico racionalmente, porque ateniéndose todos a la letra, han girado siempre en un círculo vicioso.
Al decir a Adán que sacara su alimento de la tierra con el sudor de su frente, simboliza Dios la obligación de trabajar, pero ¿Por qué hace del trabajo un castigo? ¿Qué sería de la inteligencia humana si no la desarrollara con el trabajo? ¿Y qué sería la tierra si no fuese fecundada, transformada y saneada por el trabajo inteligente del hombre? ¿Por qué dijo a la mujer que, a causa de su pecado, pariría con dolores? ¿Cómo los dolores del parto pueden ser un castigo, puesto que es una consecuencia del organismo, y que está probado fisiológicamente que el dolor es necesario? ¿Cómo una cosa que está conforme con las leyes de la naturaleza, puede ser un castigo? He aquí lo que los teólogos no han podido aún ni podrán explicar, hasta que salgan del punto de vista en que se han colocado; y sin embargo, estas palabras que parecen tan contradictorias, pueden justificarse y conciliarse fácilmente.
Observemos por de pronto, que si en el momento de la Creación de Adán y Eva, sus almas acabadas de salir de la nada, como se nos enseña, debían ser sencillas e inocentes en todo, y no podían saber lo que era morir, ya que estaban solos sobre la Tierra, mientras estuvieron en el paraíso terrestre, no vieron morir a nadie, ¿Cómo pues, podrían comprender en qué consistía la amenaza de muerte que Dios les hizo? ¿Cómo Eva habría podido comprender que parir con dolor era un castigo, puesto que acabando de nacer a la vida, nunca había tenido hijos y que era la única mujer del mundo?
Las palabras de Dios no debían tener para ellos sentido alguno, apenas salidos de la nada debían ignorar porqué y cómo habían salido; no podían comprender ni al Creador ni el objeto de la prohibición que les imponía. Sin experiencia alguna de las cosas de la vida, pecaron como niños que obran sin discernimiento; lo cual hace más incomprensible aún la terrible responsabilidad que Dios ha hecho caer sobre ellos, y sobre la humanidad entera.
Lo que es una dificultad insuperable para la teología, el Espiritismo lo explica sin dificultad alguna, y de un modo racional por la anterioridad del alma y la pluralidad de existencias; ley sin la cual todo es misterioso y anómalo en la vida del hombre. En efecto, concedamos que Adán y Eva habían vivido anteriormente, y todo quedaría justificado.
Dios no les habla ya como niños, sino como a seres en estado de comprender y que le comprenden; lo cual sería una prueba evidente de que ya sabían de antemano muchas cosas. Admitamos, además, que hayan vivido en un mundo más adelantado y menos material que el nuestro, donde el trabajo del Espíritu suplía el trabajo corporal; que por su rebeldía a la ley de Dios, figurada por la desobediencia, hayan sido expulsados de él y relegados por castigo a la Tierra, donde el hombre a consecuencia de la naturaleza del globo, está sujeto al trabajo corporal; Dios en estas circunstancias podría decirles con razón: en el mundo donde viviréis, en lo sucesivo, cultivaréis la tierra y sacaréis de ella vuestro alimento con el sudor de vuestra frente. Y a la mujer: parirás con dolores, porque tal es la condición de ese mundo. El paraíso terrestre, cuyos rastros se han buscado inútilmente en la Tierra, sería en este caso la figura del mundo feliz donde había vivido Adán, o más bien la raza de espíritus en él personificada. La expulsión del paraíso marca el momento en que estos espíritus han venido a encarnarse entre los habitantes de ese mundo, y el cambio de situación que ha sido la consecuencia. El ángel armado con una espada flamígera que prohibe y defiende la entrada en el paraíso, simboliza la imposibilidad en que están los espíritus de los mundos inferiores de penetrar en los superiores antes de haberlo merecido por su purificación.
¡Cuánto más racional, cuánto más lógica es esta explicación que el paraíso de Moisés con el árbol y el fruto prohibido!
Las grandes verdades todas son demostrables axiomáticamente; y en la historia sagrada, todo es emblemático y parabólico; y en los tratados religiosos, debían estar sus conceptos al alcance de todas las inteligencias, para que no se tergiversara el significado de sus proposiciones: porque la letra mata, y el Espíritu vivifica. La sabiduría no consiste en hablar mucho, y afirmar poco; la verdadera sabiduría se manifiesta demostrando con hechos irrefutables la verdad de los principios que se sustentan.
Dice un gran pensador, que las escuelas pierden todo aquello que quieren perder, y es muy cierto. La escuela ultramontana ella sola se aparta del movimiento científico universal; pues si por una parte se reconcilia con la ciencia, por otra inspira a sus adeptos esa fe que demuestra la pequeñez del Espíritu y que detiene el vuelo de la inteligencia, haciéndole descender desde el espacio infinito a un circulo microscópico.
Nosotros creemos que las manchas del pecado se lavan con las aguas del progreso; y ese dios que destruye lo que crea, no es el Dios de los racionalistas. ¡Nuestro Dios es más grande! ¡Es más clemente! ¡Es más justo! Tiene el tiempo ante sí, y en esa eternidad sin límites se purifican todas las humanidades por medio del trabajo, por medio del estudio y de las investigaciones científicas. ¡Sí, sí, por la ciencia! ¡Océano inmenso donde navega el hombre, buscando un puerto que se llama Dios!
Los teólogos para darle más efecto a sus fábulas religiosas, suprimen o mejor dicho, confunden el diluvio universal, el que marcó el periodo diluviano, con el diluvio bíblico, es decir, el diluvio asiático. Kardec en su Génesis hace mención de ambos, y encontramos más lógico en sus aplicaciones sencillas y naturales que en las fábulas religiosas, en las cuales hay pequeños detalles que hacen sonreír al hombre más grave.
Siendo la ciencia la demostración de Dios, ¿Qué es la revelación sin la ciencia? Un cúmulo de errores, una serie de fábulas místicas que llenan el alma de confusión. La revelación sin la ciencia es una conspiración contra la verdad que han formado todas las religiones; y que sólo ha conseguido estacionar al hombre limitando sus aspiraciones, sujetando su Espíritu con las férreas cadenas del fanatismo.
¡La ciencia es la primogénita de Dios! ¡Es Dios mismo! Y nosotros decimos refiriéndonos a esa demostración divina, lo que decía Plinio hablando del mundo.
Escuchemos al sabio filosófico; el mundo o lo que también llamamos cielo, que en su anchuroso seno abarca todos los seres, es un Dios eterno, inmenso, que no fue producido nunca ni perecerá jamás. Buscar alguna cosa fuera de Él, es trabajo inútil para el hombre y superior a sus fuerzas. Ese es el Ser verdaderamente sagrado, el Ser eterno, inmenso, que todo lo encierra y abarca; Él lo es todo y está en todo. Es obra de la naturaleza y la naturaleza misma.
Nosotros decimos: ¡Dios es la ciencia, y la ciencia es Él! Buscar la verdad fuera de la ciencia es trabajo inútil superior a las fuerzas del hombre. ¡Donde falta la ciencia sólo puede vivir el sofisma! La ciencia lo es todo; un sabio afirmaba que la ciencia y la caridad son la palabra de Dios.

Tomado del Blog "La Luz del Camino"


Con la Doctrina Espírita, todo está Definido, todo está Claro

Propagación del Espiritismo

Con la Doctrina Espírita, todo está Definido, todo está Claro

por Allan Kardec,septiembre de 1858

Mientras se han visto en el Espiritismo solamente los fenómenos materiales, las personas se han interesado por él como se interesan por un espectáculo, porque se dirigía a los ojos. Pero, a partir del momento en el que el Espiritismo se ha elevado a la categoría de Ciencia Moral, ha sido tomado en serio, porque ha hablado al corazón y a la inteligencia, y cada uno ha encontrado en él la solución de lo que buscaba vagamente en sí mismo. Una confianza basada en la evidencia ha reemplazado la incertidumbre punzante.

Desde el punto de vista elevado donde el Espiritismo nos coloca, las cosas terrenales parecen tan pequeñas y tan mezquinas que las vicisitudes de este mundo no son más que incidentes pasajeros que se soportan con paciencia y resignación. La vida corporal es solamente una corta parada en la vida del alma. Para servirnos de la expresión de nuestro sabio e ingenioso cofrade señor Jobard, no es más que un mal albergue donde no se necesita siquiera deshacer el equipaje.
Con la Doctrina Espírita, todo está definido, todo está claro, todo habla a la razón. En suma, todo se explica, y aquellos que se han profundizado en su esencia extraen de ello una satisfacción interior a la que no desean renunciar. Es por eso que la Doctrina Espírita ha encontrado, en tan poco tiempo, numerosas simpatías, y a esas simpatías las recluta, no en un círculo limitado de una localidad, sino en el mundo entero.

Si los hechos no existieran para demostrarlo, lo juzgaríamos por nuestra Revista, que tiene solamente algunos meses de existencia y cuyos suscriptores, aunque no llegan todavía a millares, están diseminados por todos los puntos del globo. Además de aquéllos de París y de las provincias, los tenemos en Inglaterra, Escocia, Holanda, Bélgica, Prusia, San Petersburgo, Moscú, Nápoles, Florencia, Milán, Génova, Turín, Ginebra, Madrid, Shangai en China, Batavia, Cayena, México, Canadá, Estados Unidos, etc. No lo decimos por fanfarronear, sino como un hecho característico. Para que un periódico recién nacido, tan especializado, sea desde hoy solicitado en esas regiones tan diversas y distantes, es necesario que la temática que trata encuentre a partidarios en esas regiones.

De otro modo no se lo haría ir, sólo por simple curiosidad, a varios millares de leguas, aunque ese periódico fuera hecho por el mejor escritor. Es, pues, por su temática que despierta interés y no por su poco conocido redactor. A los ojos de sus lectores, la temática que trata es, por lo tanto, seria. Queda así en evidencia que el Espiritismo tiene raíces en todas las partes del mundo. Desde ese punto de vista, veinte suscriptores repartidos en veinte países diferentes lo demostrarían más que cien concentrados en una sola localidad, porque no se podría suponer que se trata de una obra de un grupo cualquiera.

Extractos de "Revista Espírita 1858-1861", por Allan Kardec.

¿No se Podría ver otro Motivo en esta Teoría Exclusiva del Diablo?

Sistemas

¿No se Podría ver otro Motivo en esta Teoría Exclusiva del Diablo?

por Allan Kardec.

Creen algunas gentes que todos los que no son de su opinión van mal; así pues, aquellos que pretenden que todas las comunicaciones son obra del demonio, ¿acaso no estarían dominados por el miedo de que los Espíritus no fuesen de su mismo parecer sobre todos los puntos, principalmente sobre los que tocan a los intereses de este mundo, más que a los del otro? No pudiendo negar los hechos, han querido presentarlos de una manera pavorosa; pero este medio no ha contenido más que los otros. Cuando el miedo al ridículo es impotente, es preciso resignarse que las cosas sigan su curso.

El musulmán que oyera a un Espíritu hablar contra ciertas leyes del Corán, pensaría seguramente que éste era un mal Espíritu; lo mismo sería de un judío por lo que mira a ciertas prácticas de la ley de Moisés. En cuanto a los católicos, hemos oído afirmar a uno que el Espíritu que se comunicaba solo podía ser el diablo, porque se había permitido pensar de otro modo que él sobre el poder temporal, aunque por otra parte sólo hubiese predicado la caridad, la tolerancia, el amor al prójimo, y la abnegación de las cosas de este mundo, máximas todas enseñadas por el Cristo.

Los Espíritus, no siendo otros que las almas de los hombres, y los hombres no siendo perfectos, resulta de esto que hay Espíritus igualmente imperfectos, y cuyo carácter se refleja en sus comunicaciones. Es un hecho incontestable que los hay malos, astutos, profundamente hipócritas, y contra los cuales es preciso ponerse en guardia; pero, porque haya en el mundo hombres perversos, no es una razón para huir de la sociedad. Dios nos ha dado la razón y el juicio para apreciar a los Espíritus, así como a los hombres. El mejor medio de precaverse contra los inconvenientes que puede presentar la práctica del Espiritismo, no es el prohibirle, sino el hacerle comprender. Un miedo imaginario sólo impresiona un instante y no afecta a todo el mundo; la realidad claramente demostrada se comprende por todos.

Extractos del Libro "El Libro de los Médiums", por Allan Kardec.

12 de diciembre de 2019

Libro "Acción y Reacción" Chico Xavier\André Luiz « parte 71 »


Libro "Acción y Reacción" Chico Xavier\André Luiz « parte 71 »

–Es el reflejo de nosotros mismos –completó Leonel con una carcajada.
Creo que, observando mi gran interés en todo lo que pudiese constituir una enseñanza para mí, el asistente pidió al hermano de Clarindo, que nos expusiera alguna demostración práctica de lo que afirmaba teóricamente, para nuestro estudio, a lo que él asintió con placer, informándonos:
–El avaro que tenemos delante, tiene el propósito de comprar o usurpar una finca vecina, a cualquier precio, aun llegando a cualquier transacción criminal, con el fin de revalorizar el suministro de agua de la propiedad que nos pertenece. Tratándose de un asunto que es tema principal en su existencia, es decir, la avaricia, fácilmente recogerá las imágenes que yo desee transmitirle utilizando su propia onda mental, en la que sus propias ideas se expresan habitualmente...
Y pasando de las palabras a la acción, colocó su diestra sobre la frente de Luis, manteniéndose en profunda atención, como el hipnotizador que quiere gobernar a su presa.
Vimos al pobre amigo, desligado del cuerpo físico, abrir sus ojos con el ansia de aquél que contempla un plato sabroso a distancia, y con cara de maldad satisfecha, hablar para consigo mismo:
–¡Ahora! ¡Ahora! ¡Las tierras serán mías! ¡Nadie competirá con mis precios! ¡Nadie!... Después, se apartó rápidamente, con una expresión indefinible de locura.
Le acompañamos hasta la salida y, desde el balcón, pudimos verle avanzando deprisa, desapareciendo entre la gran arboleda próxima, en dirección a la hacienda vecina.
–¿Vieron? –exclamó Leonel, contento–. Transmití a su cuadro mental una escena fantástica, donde las tierras del vecino estarían en subasta, yendo a parar a sus manos. Bastó con que yo mentalizase una figura en ese sentido, idealizando el sitio a poner en venta, para que él lo tomase por una realidad indiscutible, ya que, tratándose de nuestro reflejo fundamental, nos vemos inducidos a creer en aquello que deseamos que suceda... tan pronto como termine el flujo controlado de mi influencia hipnótica, regresará a su cuerpo carnal, relamiéndose, en la seguridad de haber soñado con la adquisición de la granja que pretende poseer.(61)

MIS OBSERVACIONES
(61) Resulta muy sencillo para cualquier espiritu influenciar nuestras mentes cuando no estamos resguardados y con pensamientos del error. Si mantenemos una mente fuerte y sana, eso no ocurriría nunca porque no les damos lugar a los espíritus equivocados que nos dominen la mente con sus locuras. El mal solo puede darse donde existen pensamientos equivocados.

Libro Psicografiado, "Acción y Reacción", por Chico Xavier\André Luiz


» 1,...707172737475767778798090...

El respetado médium y orador bahiano Divaldo Franco dice en 1999

Esta es la Más Importante Encarnación

El respetado médium y orador bahiano Divaldo Franco dice en 1999

por Alkíndar de Oliveira

VI – El respetado médium y orador bahiano Divaldo Franco dice, en una charla proferida en 1999, que, en 2025, 200 mil espíritus altamente evolucionados retornarán a la Tierra.

Querido lector(a), conforme a la anterior información, más la información del ítem V, en que Joanna de Ángelis y Maria Modesto Cravo nos esclarece que espíritus nobles y fraternales (también inteligentes) están retornando a la Tierra con el objetivo de ayudar en la renovación del planeta, podemos entonces formular la siguiente pregunta:

¿Cómo será nuestro planeta Tierra en el 2060?

La respuesta a esta pregunta la daremos de forma deductiva:

a) En el 2060, los espíritus nobles, fraternos e inteligentes que, según los amables espíritus Joanna de Ángelis y Maria Modesto Cravo, ya están retornando a la Tierra, tendrán 70 años de edad;

b) En el 2060, los 200 mil espíritus altamente evolucionados que reencarnarán en el 2025, según la información recibida (y divulgada) por el respetabilísimo médium y orador Divaldo Franco, tendrán 35 años de edad;

c) En el 2060, los actuales líderes mundiales y otros individuos que tienden al mal, estarán desencarnados!

Conclusión – VI: En el año 2060, estarán habitando la Tierra espíritus que, por su índole, tienen todas las cualidades para habitar un Mundo de Regeneración, dentro de los límites del tiempo en que Kardec afirma que el Espiritismo será creencia común.

Somos habitantes de la Tierra en un momento muy especial, lo que es una dádiva divina. Esta es la gran oportunidad que tenemos de iniciar la reparación de nuestros errores del pasado. Precisamos, con toda nuestra fuerza, con toda nuestra voluntad, con todo nuestro empeño, aprovechar esta oportunidad de estar habitando este planeta que, luego, luego, nos puede dar la condición de tener un ambiente donde la tendencia al bien sea la tónica. ¿Cómo alcanzar esa gracia? La única solución es iniciar ya nuestra regeneración espiritual.

Tomado del Sitio "Centro de Estudios Espíritas Francisco de Asís"

Muerte de Ian Stevenson (Octubre 31, 1918 - Febrero 8, 2007)

Muerte de Ian Stevenson (Octubre 31, 1918 - Febrero 8, 2007)


Con la frase...
“Es con un gran pesar que el staff del DOPS (Division of Perceptual Studies) anuncia el fallecimiento de nuestro más admirado fundador y colega el Dr. Ian Stevenson. Murió el 8 de Febrero de 2007, en Charlottesville, Virginia” fue anunciada la desencarnación de este gran científico, doctor en psiquiatría de la Universidad de Virginia. Su libro “Twenty Cases Suggestive of Reincarnation” (Veinte casos que hacen pensar en la Reencarnación), publicado en primera edición en 1966 (1974, segunda edición, revisada y ampliada), es un relato de las investigaciones y análisis que el Dr. Stevenson efectuó con rigor y meticulosidad; consiguiendo con esa gran contribución que la comunidad científica tomara en consideración esta “posibilidad”, para nosotros “certeza”, de la reencarnación. A pesar de que el propio autor se mostrara claramente partidario de la hipótesis reencarnacionista, oficialmente no se definió de una manera tajante sobre ello, al utilizar la palabra “suggestive” (hacer pensar en…) en el título de su obra más conocida; actitud, por otra parte, propia de cualquier persona sensata, y aún más, en su caso, como científico que era.

El mecenazgo de Chester Carlson fue determinante para el Dr. Stevenson, pues ello le permitió que pudiera iniciar esa etapa de investigación, según refiere, entre otras cosas, Maurice Herbert Jones, presidente del Centro Cultural Espírita de Porto Alegre (CCEPA), Brasil, en el artículo de su autoría, publicado en el número 139 (marzo 2007) de Opinião, órgano de divulgación de la citada Asociación, que reproducimos seguidamente:

(…) “Nacido el 31 de Octubre de 1918 en la ciudad de Montreal, Canadá, Stevenson se estableció en los Estados Unidos en cuyos medios académicos empezó a destacar cuando, ejerciendo la dirección del Departamento de Medicina Psiquiátrica de la Universidad de Virginia, fijó su atención, en 1960, en un caso de un niño en Sri Lanka que decía recordar su vida anterior. La investigación de este caso le impresionó profundamente, convenciéndolo de que la reencarnación era, posiblemente, una realidad. A medida que otros casos fueron surgiendo, decidió centralizar sus investigaciones en la exploración de ese fascinante y desconocido campo, excluido, hasta entonces, de la observación científica.”

“La publicación de los primeros artículos del Dr. Stevenson sobre el asunto, despertó el interés del inventor de las máquinas Xerox, Chester Carlson, que en 1961 financió la primera investigación en la India y en Sri Lanka donde pudo identificar y estudiar cerca de 25 casos de recuerdos espontáneos de vidas pasadas en niños, aportando argumentos a su teoría según la cual la reencarnación sería un tercer factor que, junto con las influencias hereditarias y ambientales, determina el desarrollo del carácter.”

“En 1963, Chester Carlson fallece súbitamente y deja, en el testamento, un millón de dólares para la creación de una cátedra específica en la Universidad de Virginia, así como un millón más para que el mismo Dr. Stevenson prosiguiera sus investigaciones sobre reencarnación. Este hecho hizo posible la creación, por Stevenson, de la División de Estudios de la Personalidad, único departamento académico en el mundo dedicado al estudio de los recuerdos de vidas pasadas, experiencias de casi muerte y otros fenómenos paranormales. A partir de ahí, con los recursos a su disposición, viajó por todo el mundo examinando casos y reuniendo elementos para sustentar su tesis.”

“En 1962 estuvo en Brasil investigando siete casos, dos de los cuales, identificados en el interior de Rio Grande do Sul, están incluidos en el libro “Veinte casos que hacen pensar en la Reencarnación”, publicado en 1966. (…) En 1972 visitó de nuevo Brasil, invitado por el Instituto Brasileño de Investigaciones Psicobiofísicas, dirigido por el Ingeniero Hernani Guimarães Andrade (1913–2003), también investigador de renombre en el mundo y copartícipe suyo en muchas investigaciones.”

“Ian Stevenson publicó centenares de artículos dentro de esta especialización, y cerca de diez libros abordando, principalmente, temas relacionados con la memoria extracerebral. Merece ser especialmente destacada su obra, en dos volúmenes, “Reencarnación y Biología”, una contribución al estudio de la etiología de las marcas y defectos de nacimiento, publicada en 1997.”

Extractos del Boletín "Flama Espírita"

Centenares de enfermos que sobrevivieron a la muerte

Visión Integral: el Poder del Espíritu

Centenares de enfermos que sobrevivieron a la muerte

por Hernani Guimarães Andrade.

No hay tiempo para detallar investigaciones, pero es oportuno recordar, por lo menos, las que se refieren a la Experiencia de Casi Muerte, cuyos registros han sido realizados por colegas médicos de diversos países, psicológicos y otros investigadores y que evidencian la presencia de un ser inmaterial, presidiendo el cuerpo humano.

Centenares de enfermos que sobrevivieron a la muerte, relataron a los investigadores las experiencias que vivieron, en el lapso de tiempo en que fueron considerados clínicamente muertos. Esos casos pueden ser acompañados en la casuística del cardiólogo Michael Sabor, de los psiquiatras Raymond Moody Jr y Elizbeth KüblerRoss, del pediatra Melvin Morse, y de los psicólogos Kenneth Ring y Margot Grey, además de otros.

Aún recientemente, en diciembre del 2001, la conceptuada revista Lancet publicó un artículo científico de autoría de un equipo de médicos de Holanda, dirigido por el cardiólogo Pim Van Lommel, sobre la investigación de ECM (NDE), realizada en 344 pacientes que sufrieron una parada cardiaca y fueron resucitados, con éxito, en diez hospitales holandeses. Los pacientes fueron entrevistados, durante los primeros días después de haber tenido la experiencia, y acompañados, durante un periodo de varió de dos a ocho años después de los eventos, para la debida evaluación. Del total de supervivientes investigados, 41 pacientes (12%) describieron una experiencia profunda, con elementos que caracterizan una ECM.

Las investigaciones de ECM llevan a muchas preguntas. ¿Conciencia y memoria estarían, realmente, localizadas en el cerebro, como quieren los analistas materialistas, o estarían en el alma y tendrían, en el encéfalo, su reflejo, o su instrumento de expresión, conforme piensan los espiritualistas? ¿Cómo podría el paciente experimentar una clara conciencia, fuera del cuerpo, en el momento en que el cerebro es afectado por una parada cardiaca y el electroencefalograma se muestra plano?

La explicación trascendental, espiritualista, sustenta que la ECM estaría ligada a un estado alterado de conciencia, durante el cual el alma se dislocaría del cuerpo, conservando, sin embargo, su capacidad de percepción no sensorial, su identidad, cognición y emoción independientemente del cuerpo inconsciente. Además, esa es la explicación más aceptada por todos los que pasaron por ese tipo de experiencia.

Extractos del Libro "El Alma de la Materia", por Hernani Guimarães Andrade.

El Alma no está en Ningún Lugar Determinado del Cuerpo Humano

Del Alma

El Alma no está en Ningún Lugar Determinado del Cuerpo Humano

por Allan Kardec.

144 – ¿Qué debe entenderse por alma del mundo?
– Es el principio universal de la vida y de la inteligencia de donde se originan las individualidades. Pero, aquellos que se sirven de esas expresiones, con frecuencia, no se comprenden. La palabra alma es tan elástica que cada uno la interpreta con arreglo a sus fantasías. Ya se le atribuyó también un alma a la Tierra; es necesario entenderla como el conjunto de Espíritus consagrados que dirigen vuestras acciones por el buen camino, cuando les escucháis, y que, de cierta manera, son los lugartenientes de Dios con relación a la Tierra.

145 – ¿Cómo se explica que tantos filósofos, antiguos y modernos, hayan discutido tanto tiempo sobre la ciencia psicológica sin haber alcanzado la verdad?
– Esos hombres, que eran los precursores de la Doctrina Espírita eterna, han preparado el camino, pero eran hombres y se equivocaron al tomar sus propias ideas por la luz. Pero, sus mismos errores, demostrando el pro y el contra, sirven para poner en claro la verdad. Además, entre esos errores se encuentran grandes verdades, que un estudio comparativo os lo hará comprender.

146 – ¿Tiene el alma un lugar determinado y circunscripto en el cuerpo?
– No; pero reside particularmente en la cabeza, en los grandes genios, en todos aquellos que piensan mucho y en el corazón, en los que sienten mucho y dirigen sus acciones a toda la Humanidad.
– ¿Qué pensar de la opinión de los que sitúan el alma en un centro vital?
 – Quiere decir que el Espíritu habita con preferencia, esa parte de vuestro organismo, porque hacia ella convergen todas las sensaciones. Los que la sitúan en lo que consideran como centro de la vitalidad, la confunden con el fluido o principio vital. Como quiera que sea, puede decirse que el alma reside más particularmente en los órganos que sirven a las manifestaciones intelectuales y morales.

Extractos del Libro "El Libro de los Espíritus", por Allan Kardec.



P145 En esta respuesta se deja en claro que los grandes pensadores del ayer que dieron sus primeras enseñanzas, pueden haber cometido errores. Se los atribuye al error de tomar sus propias ideas por la luz. ¿Que puede tomar un espíritu mas que sus propias ideas sopesadas y cruzadas con las de otros?¿acaso este espíritu que responde la pregunta, cree en que en algún lugar está la Verdad Absoluta a la que delicadamente le llama luz?
Esos hombres que critica por haber cometido errores, son los que luego como desencarnados han seguido dictando sus estudios y experiencias. Algunos seguramente afirmando lo que pensaban antes y otros tal vez con ideas mas renovadas. Pero en definitiva la Verdad es una construcción eterna que hacemos todos los que constituímos el Todo lo que Existe.
P146 El alma no está en ningún lugar determinado del cuerpo humano porque no es Algo que tenga forma, dimensión, peso, para que ocupe espacio. Es solo un fluído espiritual ligado transitoriamente con un fluido material. Aunque no es tan así como lo sintetizo, lo dejamos por ahora definido como alma y cuerpo carnal enlazados sin ubicación alguna.

¿Puede estar Dividida el Alma?

Del Alma

¿Puede estar Dividida el Alma?

por Allan Kardec.

141 – ¿Qué hay de cierto en la opinión de los que piensan que el alma es exterior y circunda al cuerpo?
– El alma no está aprisionada en el cuerpo como un pájaro en la jaula, sino que irradia y se manifiesta a su alrededor como la luz a través de un globo de cristal, o como el sonido alrededor de un centro sonoro; en ese sentido se puede decir que es exterior, pero no es por sí la envoltura del cuerpo. El alma tiene dos envolturas: una sutil y ligera que es la primera, llamada periespíritu; otra grosera, material y pesada, que es el cuerpo. Ya lo hemos dicho, el alma es el centro de esas envolturas, como el germen en un núcleo.

142 – ¿Qué decir de esta otra teoría según la cual el alma, en los niños, se completa en cada período de la vida?
– El Espíritu es uno sólo, y está tan entero en el niño como en el adulto. Son sus órganos o instrumentos de manifestación del alma los que se desarrollan y completan. También aquí se toma el efecto por la causa.

143 – ¿Por qué todos los Espíritus no definen el alma de la misma manera?
– Todos los Espíritus no están igualmente instruidos sobre estas cuestiones y los hay aún tan limitados que no entienden las cosas abstractas, como ocurre entre vosotros con los niños. También hay Espíritus pseudosabios que para imponerse hacen alarde de palabras, lo mismo como sucede entre vosotros. Además, los mismos Espíritus ilustrados con frecuencia pueden expresarse en diferentes términos, que en el fondo tienen el mismo valor, sobre todo cuando se trata de cosas que vuestro lenguaje es inadecuado para expresar con claridad; necesitan de figuras y comparaciones que tomáis por la realidad.

Extractos del Libro "El Libro de los Espíritus", por Allan Kardec.



P143 Esta respuesta tiene un contenido interesante para analizar pero no precisamente por su respuesta a la pregunta, sino por las consideraciones que hace de los espíritus que se manifestaron en tiempos de la doctrina.
Queda bien claro que la pregunta viene a raiz de la duda de encontrarse con respuestas diferentes y llegar a asertar con la correcta.
El espíritu le responde que hay varias consideraciones a tener en cuenta. Una y la principal es que hay espíritus ilustrados que pueden expresar ideas hasta irracionales pero con una contundencia que pueden considerarse verdades inobjetables, y otra consideración es la que deriva a la falta de palabras para expresar conceptos espirituales tan elevados. Ambas trabas ocasionan que las respuestas no siempre se interpreten de la misma manera y den resultados ambiguos y además de ser posiblemente interpretadas erroneamente, también Kardec puede haber optado por dar como cierta la menos correcta y al difundirse en su doctrina, arrastrarse ese error.
Por eso el mismo Kardec insistió en la revisación permanente de la doctrina. ¿Sentiría en la intimidad que con el tiempo se podría sacralizar y venerar su doctrina como ocurre habitualmente con todos los genios que se han destacado en la tierra? Yo creo que Si.



11 de diciembre de 2019

Libro "Acción y Reacción" Chico Xavier\André Luiz « parte 70 »


Libro "Acción y Reacción" Chico Xavier\André Luiz « parte 70 »

Leonel, percibiendo que Silas penetraba en lo íntimo del problema con sorprendente facilidad, explicó entusiasmado:
–Sí. Hemos aprendido en las escuelas vengadoras (60) que todos poseemos, además de los deseos inmediatos comunes, en cualquier fase de la vida, un “deseo central”, o “tema básico” de los intereses más íntimos. Por tanto, además de los pensamientos vulgares que aprisionan nuestra experiencia rutinaria, emitimos con más frecuencia los pensamientos que nacen del “deseo central” que nos caracteriza, pensamientos esos que pasan a constituir el reflejo dominante de nuestra personalidad. De ese modo, es fácil conocer la naturaleza de cualquier persona, en cualquier plano, a través de las ocupaciones y posiciones en que prefiera vivir. La crueldad es el reflejo del criminal, la avaricia es el reflejo del usurero, la maledicencia es el reflejo de la calumnia, el escarnio es el reflejo del irónico y la irritación es el reflejo del desequilibrado, siendo del mismo modo que la moral es el reflejo del santo... Una vez conocido el reflejo de la criatura que deseamos cambiar o castigar, es muy fácil sobrealimentarle con excitaciones constantes, robusteciendo sus impulsos y las escenas ya existentes en su imaginación, y creando otros que se les superponen, alimentando, de esa forma, su fijación mental. Con ese objetivo, basta con poco esfuerzo para situar, en la convivencia de la criatura que queremos asediar, otras entidades que se adapten a su modo de sentir y de ser, siempre cuando no podamos, por nosotros mismos, por falta de tiempo, crear las imágenes que deseamos para los fines perseguidos, por intermedio de la hipnosis. A través de esos procesos, creamos y mantenemos fácilmente el “delirio psíquico” o “la obsesión”, que no pasan de ser un estado anormal de la mente, subyugada por el exceso de sus propias creaciones, presionando el campo sensorial, infinitamente aumentadas por la influencia directa o indirecta de otras mentes, desencarnadas o no, atraídas por su propio reflejo.
Y, sonriendo, el inteligente perseguidor, dijo con el mayor sarcasmo:
–Cada uno es tentado exteriormente, por la tentación que alimenta dentro de sí mismo.
Yo me hallaba perplejo. Nunca había escuchado un verdugo, aparentemente vulgar, con tanto conocimiento y conciencia de su papel.
Creía estar asistiendo a un curso rápido de sadismo mental, extravagante y frío.
Silas, más entrenado que yo en el trato con entidades de esa condición, no reveló sentimiento alguno de pesar o de asombro, en su rostro.
Sin embargo, mostrando gran interés por aquella exposición, comentó:
–Indiscutiblemente, lo expuesto es perfecto. Cada uno de nosotros vive y respira en los reflejos mentales de sí mismo, atrayendo las influencias felices o desgraciadas que nos mantienen en la situación que buscamos... El cielo o los planos superiores, están constituidos por los reflejos de los espíritus santificados, mientras que el infierno...

(60)  La entidad se refiere a organizaciones mantenidas por inteligencias criminales, temporalmente situadas en los planos inferiores (nota del autor espiritual).

Libro Psicografiado, "Acción y Reacción", por Chico Xavier\André Luiz


» 1,...707172737475767778798090...